Qué grave injusticia. Antes de que comenzaran las obras, uno podía dejar su camión tranquilamente en medio de la calle y descargar las cajas que a uno le daba la gana. Total, los coches pasaban tranquilamente y los autobuses, con cuidadín, pues también. Pero ahora, como ya no hay calle si no zanjas, pues ya no hay manera de parar el camión. Y, para colmo, si lo aparcas en el sitio "de toda la vida", te multan.
El comercio van a hundir así.
"Aquí delante justito dejaba el señor su camión"
2 comentarios:
Pero señora, ¿es que no ve que estoy TRABAJANDO? ¡Que soy un honrao profesionás, señora!
es cierto que le eliminan posibles posibles clientes, yo mismo desde que empezaron las obras no voy ni andando por esas calles. Pero en cuanto estén terminadas protestarán igual por tener que contratar más gente para poder atender a los clientes (no es broma: el dueño del bar de la plaza de la independencia, jefe de las protestas cuando la obraron, se lamentaba de tener que contratar a más camareros por no poder atender a su nueva y numerosa clientela).
y respecto a los transportistas, tienen todo mi respeto: como ellos mismos dicen, son los que ponen al pais en funcionamiento.
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