Uno no acaba de entender muy bien determinadas polémicas. La buena de Perly ha sido, hasta la fecha, la única alcaldesa que ha firmado algún convenio con el Ministerio de Fomento respecto a la entrada del AVE por Teis. Dicho convenio, que fue ratificado por el pleno del Ayuntamiento, incluía las expropiaciones de varias viviendas. Hubo, como es norma en estos casos, tensión a la hora de determinar la cantidad económica que iban a recibir estos vecinos por sus viviendas. Estas cosas, pienso yo, no pasarían si la gente viviera en casas con licencias de habitabilidad, pagando impuestos por todas sus plantas y subterráneos. Pero eso es otro cuento, el caso es que las negociaciones no debían de ir mal del todo cuando tan sólo quedaron nueve vecinos en litigio con el Ministerio y de estos nueve, por las noticias de estos días, ocho de ellos ya habían empezado a adquirir nuevas viviendas, con sus hipotecas y sus avales bancarios.
El caso es que llegó Caballero a la alcaldia y prometió a estos vecinos que no les iban a expropiar sus viviendas, porque el AVE, en realidad iba a pasar por debajo de sus casas y no por encima. Asunto arreglado, parecía. Y así hasta que la cosa de pagar las nuevas casas se va poniendo complicada, probablemente acaban los periodos de carencia (ésos que dan los bancos, un año casi siempre, durante los que sólo se pagan intereses y no se devuelve el capital prestado) y los intereses suben. Mientras tanto, puesto que la expropiación es una gestión que se lleva por medio de los juzgados en la mayoría de las ocasiones (cuando no se ponen de acuerdo las partes, como es el caso), éstos no hacen mucho caso de los planes del Excelso Alcalde ni de sus túneles.
El Ministerio, mientras tanto, como no lo gobierna Alvariño, pues tarda en hacer las cosas de los estudios geotécnicos, medioambientales, económicos, etc. que supone la variación del túnel. Ya se sabe que desde Madrid no entienden nuestras viguesas necesidades imperiosas que nos obligan a pagar a los portugueses sueldos de mierda.
Puesto que los vecinos se quejan (menudos son los de Teis para estas cosas, que el Concello todavía tiemblan recordando los dedos perdidos a causa de la empacadora), el resto de la corporación, Bng y Pp, aprovechan para indignarse y reclamar soluciones urgentes. Incluso el Atlántico Diario informaba ayer de que una vecina envejecía mientras se solucionaba este asunto. Angustioso. Pero ya no quieren quedarse con sus casas, quieren que se las expropien para poder pagar la hipoteca de la nueva vivienda.
El caso es que tanta queja y tantas ganas de meter el dedo en el ojo, aunque sea el de tu bisocio de gobierno, ha llevado a decir que las expropiaciones son un escándalo, que no se pueden llevar a cabo, aunque sea lo que quieren los vecinos. Ha llegado en éstas el Caballero, que andaba por Madrid con unos amiguetes a ver si le dejaban meter baza en alguna partida. Le ha tirado de la oreja al Olveira, que fue quien largó, y al Pp, que fue quien firmó las expropiaciones y se ha quedado tan pancho.
A estas alturas no hay proyecto de entrada del AVE en la ciudad más que el firmado por Perly. Si se realizan las expropiaciones será porque sale adelante este proyecto, y no otro. O porque el túnel exige igualmente expropiar, lo que dejaría igualmente en mal lugar al Caballero, que ya ha asegurado que no hacía falta. Y la tercera opción es que se presente este proyecto de entrada en Vigo y no una maqueta superchulísima en el Fallo de Vigo. Ya esperar que además se estuviera callado el alcalde sería esperar demasiado. Y si a los vecinos de Teis les embargan sus nuevas viviendas y se tienen que quedar en las viejas, pues hombre, un sustillo lo pasamos todos. Los intereses pagados hasta el momento, los costes bancarios y de notarios pues ya los calculará el Fallo de Vigo y ya los reivindicará el Bng y la Perly, que son expertos en la cosa social.
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