miércoles, 13 de febrero de 2008

sms


Al poco de que el bialcalde Caballero nombrara a Carmela Silva concejal de urbanismo recibí un sms informándome de que el alcalde había nombrado a su "querida" mano derecha en el Concello. Puesto que Vigo no deja de ser una aldea donde todo el mundo conoce a Michel Salgado, pronto supe que la tal Carmela, además de tener toda la pinta de ser una envidada del PSOE de Madrid para controlar el caótico urbanismo vigués, tenía pareja estable desde hacía años y un hijo que por lo visto juega al fútbol. Cotilleos, a fin de cuentas, de esos ante los que el señor boticario tuerce el gesto al leerselos en la carta enviada desde la capital por la hija del Macario a su padre.

Si a esto le unimos el que el PP sabe bien que Vigo no deja de ser esta aldea que es, no es de extrañar ni que el aguerrido Sagarra acuse a Olveira de extralimitarse cuando sale a cenar ni que el campeón del cubalibre, Figueroa, deje caer insinuaciones feas respecto a la honorabilidad de Silva. Sin duda, el bueno de Sagarra, buscando trapos sucios de Olveira en el Google encontró alguna referencia sospechosa. Es lo que llaman "acceso a las nuevas tecnologías" y "modernización del partido" en el PP.

Menos comprensible es el enfado de la concejala de urbanismo. La acusación de machismo es totalmente injustificada. El Figueroa le va a regalar un tanga y un osito de peluche a su churri mañana, porque es un tío sensible y si quiere un revolcón lo sabe pedir con la delicadeza que una dama se merece, faltaría más. Nada de eructos y pedos fuera de lugar y sí mucha caricia en el culo, mucho mencionar lo grandes que tiene las tetas la interfecta y lo limpio que lo tiene todo y lo bien que le ha salido el postre. Ya lo de la secretaria es otra cosa. ¡Sólo faltaría que uno no pudiera ahora tocarle el culo a su secretaria!

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