jueves, 8 de enero de 2009

los límites

Cuando se varió el Código Penal para sancionar a los conductores cafres que disfrutan poniendo la vida del prójimo en peligro hubo quien se alarmó contando hasta 50.000 nuevos presidiarios al año. También hubo quien comparaba estas penas con otros delitos, como si los conductores temerarios no mataran a nadie, los pobres.

Estamos seguros de que aquellos alarmistas, preocupados por el buen orden y el buen juicio de nuestros conductores, seguros de la habilidad al volante del español medio e indignados con tanto progre listillo, estarán hoy un poco más contentos.

No hay comentarios: